Hoy os quiero mostrar y narrar el reportaje de boda que realicé a Oihana e Igor en el Parque Natural de Urkiola y en Otxandio.

Este reportaje de boda lo tengo muy bien guardado en mi memoria ya que lo realizamos en enero y el frío fue uno de los protagonistas de la la primera parte del reportaje.

Finales de enero, nueve de la mañana, algo de niebla en ese momento, tres grados de temperatura, viento racheado y ¡hala chavales, a «posar» y a sacar fotos!

Aparcamos los coches en el aparcamiento mas cercano al Santuario de Urkiola y de ahí fuimos dando un paseo hasta el Mirador de las Tres Cruces haciendo diferentes paradas en el camino. Es un trayecto de corto recorrido pero que sin embargo ofrece muchos rincones y apartados para estar tranquilos y hacer el reportaje a gusto como veréis luego en las fotografías. Por lo general me gusta que la pareja que voy a fotografiar elija los lugares del reportaje porque creo que así hay un vinculo emocional con el lugar. Oihana e Igor son grandes amantes de las montañas y de la naturaleza y a pesar del frío y la niebla, estaban en su salsa.

El propio camino hasta el Mirador de las Tres Cruces ofrece también buenas opciones fotográficas por su estética romántica y por tener enfrente parte de las montañas del Duranguesado. Andábamos un poco, nos desviábamos del camino buscando ese lugar entre hayas para hacer unas fotos, (¡joder, que frío hace!), risas, manos y pies congelados, moquillo por doquier, mas risas, mas frío, mas fotos…

Poco a poco y como habían anunciado las previsiones del tiempo, fue abandonándonos la niebla y el frío y tanto las caras y gestos de los fotografiados como mis dedos empezaron a ser menos forzadas y más naturales. A esta altura ya estábamos al final del camino y la verdad que las vistas son espectaculares. Solo por esa visión de las montañas del Duranguesado merece la pena acercarse hasta este punto. Mugarra, Alluitz, Anboto…espectacular.

El camino de vuelta fue más relajado y «cálido», ya lucía el sol y nos acercamos hasta el Santuario para intentar hacer una fotografía un poco diferente del resto del reportaje, menos romántica pero mas inusual. Esta idea surgió de mi ayudante Ion, que para estas cosas es muy creativo y rápido de ideas. Aunque lo habíamos hablado los días anteriores no estábamos seguros de que la idea pudiera funcionar. Se trataba de hacer una fotografía de Oihane saltando «a lo loco» y que Igor la mirase con cara de indiferencia. La verdad es que hicimos unas cuantas pruebas y al final pensamos que mereció la pena.

reportaje de boda

Como veis, a estas alturas los abrigos ya sobraban.

La última parte del reportaje la realizamos en Otxandio, pueblo que se encuentra muy cerca del Parque Natural de Urkiola en dirección a Vitoria-Gasteiz. Queríamos hacer una fotos más callejeras y en otro entorno y también tomarnos un caldo bien caliente para reponernos un poco.

Espero que os gusten las fotos y que las disfrutéis mucho. Podéis ver este otro reportaje de boda aquí, por si os lo perdisteis.

Muchas gracias chicos/as por vuestra complicidad, romanticismo, actitud y amabilidad. Un abrazo Oihana, Igor y Ion.